Pese a que los inversores extranjeros ven al Perú como una economía relativamente estable y con cifras fiscales positivas, aún genera desconfianza para invertir debido a la crisis política y social que se arrastra desde el año pasado, opinó el director del Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales de la Asociación de Exportadores CIEN-ADEX, Edgar Vásquez Vela.
Durante su intervención en la mesa de trabajo «Estado situacional de la economía peruana: Análisis, perspectivas y proyecciones», organizada por el Congreso de la República, el ejecutivo señaló que el Estado aún no hace ningún tipo de campaña agresiva para recuperar la imagen del Perú en el exterior: «Cuando los empresarios peruanos tratan con clientes internacionales, muchos destacan las bondades del país en cuanto a productos y servicios, pero no sucede lo mismo respecto al entorno de negocios», agregando que necesitan «inversiones productivas, que vengan nuevas industrias, pero para ello debemos generar confianza en el entorno internacional y no vemos la ambición de lograrlo».
Vásquez Vela explicó que 2023 se ha caracterizado por una caída en la demanda internacional en un contexto de desaceleración económica mundial, en la que las grandes economías –incluyendo China– están ralentizándose, lo que terminará afectando el desenvolvimiento de las exportaciones peruanas, sumado a los conflictos sociales, condiciones climatológicas adversas y a una baja cotización de los commodities. En ese sentido –prosiguió–, el camino es realizar un trabajo conjunto con el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR), las Oficinas Comerciales del Perú en el exterior (OCEX), PromPerú, el Ministerio de Relaciones Exteriores y el acompañamiento del sector privado.
