Durante la última década, los incendios de portacontenedores han experimentado un preocupante aumento, con un número notable de víctimas y pérdidas totales, según un reciente informe del Consejo Mundial del Transporte Marítimo (WSC).
A pesar de los esfuerzos de la industria y los gobiernos, la carga peligrosa que no ha sido declarada, o que ha sido declarada o etiquetada incorrectamente, continúa provocando incendios y explosiones, hiriendo y matando a las tripulaciones de las embarcaciones y al personal de transporte, informó la WSC.
TT Club estima que cada 60 días se produce un incendio grave en un barco. Uno de los factores clave que contribuyen a estos incendios es la carga peligrosa que no ha sido declarada, que está mal declarada o bien, que no ha sido empaquetada adecuadamente por los transportistas.
A pesar de la existencia de regulaciones internacionales completas y claras sobre el transporte de mercancías peligrosas, estas siguen siendo declaradas erróneamente o no declaradas en absoluto, lo que complica la detección, puede provocar incendios en los buques y hacer que la lucha contra incendios sea mucho más difícil, reportó el WSC. De hecho, en 2022, los incidentes relacionados con incendios en el mar aumentaron más del 17% en comparación con el año anterior.
Reconociendo la necesidad urgente de mejorar las medidas de seguridad, la WSC está encabezando un enfoque integral para salvaguardar vidas, proteger el medio marino y asegurar cargas y embarcaciones.
Sobre la base de los procesos y políticas de control que ya utilizan los transportistas miembros, el WSC está desarrollando un proceso industrial compartido para el control y las inspecciones de carga.
John Butler, presidente y Director General de la WSC, señaló que «Un enfoque industrial común hacia la seguridad de la carga creará un ambiente de trabajo más seguro no sólo para las tripulaciones de los barcos, sino (que) para todos los involucrados en el transporte terrestre o que trabajan en puertos y terminales, así como para las comunidades que nos rodean», añadiendo que «para los transportistas, hará que el transporte marítimo sea más eficiente y confiable, al detener envíos peligrosos que pueden alterar la cadena de suministro».
Según se informa, esta iniciativa voluntaria se basará en una solución digital compuesta por una herramienta de detección común, una base de datos de transportistas verificados y una base de datos de empresas de inspección de contenedores aprobadas, proporcionada y operada por un proveedor externo independiente.
La funcionalidad principal del sistema será comparar la información de reservas con una biblioteca integral de palabras clave y un algoritmo de riesgo. Las reservas de alto riesgo se marcarán para una mayor investigación y/o inspección, y las lecciones aprendidas a través de la experiencia se utilizarán para mejorar continuamente la herramienta de detección.
Según el WSC, el énfasis está en identificar y corregir condiciones peligrosas antes de que los contenedores con cargas peligrosas se introduzcan en la cadena de suministro.
El WSC inició ayer el proceso para encontrar un proveedor externo independiente para desarrollar las herramientas digitales y gestionar el proceso del Programa de seguridad de la carga para la inspección y la inspección de la carga.
Con información de Port Technology
