Gracias a un trabajo interagencial entre la Policía Marítima -dependiente de la Armada de Chile-, el departamento OS-7 de Carabineros y el servicio de Aduanas, se pudo desarticular a una organización criminal internacional que operaba en la Región de Valparaíso y que pretendía ingresar por vía marítima al país un cargamento de más de 350 kilos de marihuana proveniente de Colombia.
Tras dos meses de investigación y un exhaustivo trabajo liderado por la fiscalía de focos de Valparaíso, con apoyo internacional de las fiscalías de Colombia, Ecuador y Perú, se logró la detención en Santiago de tres ciudadanos extranjeros, miembros de una organización criminal internacional que pretendía enviar una remesa de droga a Chile utilizando como corredor de salida la vía marítima, a través del puerto de Valparaíso, en carga contenerizada.
El operativo, cuyo nombre clave fue «Cali II», generó un amplio despliegue y diligencia del personal de la policía marítima especializada, en conjunto a una unidad de Carabineros especializada en la lucha contra el narcotráfico y el servicio Nacional de Aduanas de Chile, permitió la incautación de 363 kilos de marihuana, lo que equivale a cerca de 760 mil dosis, las que iban a ser comercializadas en la Región de Valparaíso, y que estaba avaluada en 6 mil millones de pesos chilenos, cerca de USD $6 millones y medio.
Los detenidos fueron formalizados en el Juzgado de Garantía de Valparaíso, quedando con medida cautelar de prisión preventiva, fijándose un plazo de investigación de 120 días.
Con información de Aton